jueves, diciembre 29, 2005

NARNIA



Anoche ví Las Crónicas de Narnia: El León, La Bruja y El Ropero.
Es una de las diez mejores películas que haya visto desde 1999 hasta el presente.

Se trata de una historia escrita por C.S. Lewis, pensada como una lección épica de religión para niños. Es un libro corto, certero, directo, con pocas ambigüedades y con un simbolismo cristiano claro y preciso. A quien no le guste esto y vaya a verla, le advierto: Usted está más perdido en ese sitio que Idi Amín Dadá en un almuerzo en honor a la madre Teresa de Calcuta. Váyase. Porque la película es todo eso y más.

Tenía tiempo sin ver una película dominada por un director como una araña maneja su hilo. Andrews desechó toda explicación superflua primero; después prescindió de toda explicación que no fuese vital y, en ocasiones, no dio ninguna explicación, confiando en la fantasía e imaginación del público, como todo director serio y decente debe hacer, entendiendo que decirlo todo es matar la participación, el granito de arena, del espectador. Magistral. Como ejemplo cito a la piedra de los sacrificios, la cual, a pesar de aparecer apenas unos cuantos minutos, el espectador puede adivinar su importancia y peso en la trama.






Por otro lado, los efectos especiales, todos de gran factura, NO SE VEN. El león parlante, las arpías, los minotauros, centauros, faunos y otros personajes mitológicos son creíbles; más aún, se aceptan como parte de la historia. ¿Por qué? Pues, porque es una historia muy bien contada, con acción que no decae y los diálogos justos, sin excesos ni pompa. Cada personaje tiene su significado, sin apabullar a otros. Así pude contar hasta seis protagonistas.

¿¡Seis!? Los cuatro niños, el león y el fauno son, cada uno en sus momentos, los conductores del hilo narrativo y la razón de ser de ese segmento de la historia que les toca protagonizar. Eso, señores, no es fácil para ningún cineasta.

Sí, lo sé. La Bruja es muy lineal, un personaje malo-malo estilo Grinch. Y Aslan, el león, demasiado bueno. Pero, ubiquémonos. Es una película para niños. De paso, es sobre religión; no se distraigan con los 15 mil personajes en batalla. Para colmo, es de Disney. ¿Saben ustedes la presión que se siente firmar "Disney"? Basta que aparezca la firma o que se asomen las orejitas del ratoncito, para que una caterva de fundamentalistas empiecen a analizar las películas con microscopio electrónico, las vean en cámara lenta en reversa (Lo hacen, y yo opino que son locos de atar y unos vagos) y hasta escriban cartas amenazando a los del estudio con el infierno y a los congresantes exigiéndoles no permitan que el Pato Donald aparezca sin pantalones. Con todo esto quiero decir que Disney y el director intentaron salir airosos y lo lograron.






Narnia quedará para mí como referencia obligada cuando converse sobre unidad temática y cohesión al contar una historia. Sin decaer, sin concesiones, de principio a fin, Narnia es un canto a lo que debe ser un guión, sin guindajos, adornos superfluos pseudo-culturales ni guiños y referencias a otras películas y situaciones que no son más que muletas ante las carencias del equipo responsable de la criatura (léase obra, de cine, de literatura, de oratoria, lo que sea).

Lo mejor de todo es que, cuando Narnia termina, te quedan ganas de abrir la puerta del ropero y meterte de cabeza en él... Y soñar.


lunes, diciembre 26, 2005

Relato Grotesco Navideño

I

La vida de Tony Martínez habría sido corta y azarosa de no haberle ocurrido un par de hechos que cambiaron su vida.

El primero de ellos sucedió a finales de los años 70, cuando cayó de su motocicleta a más de 100 kilómetros por hora y completamente drogado. Cuando salió del Hospital, había dejado atrás sus dos piernas, amputadas un poco por encima de las rodillas.

A partir de entonces, sería ex-pandillero y uno de los mendigos que más lástima inspiraría paseando en su silla de ruedas por la urbanización El Viñedo, en Valencia.

Pero otro hecho, más extraordinario aún, le esperaba un día de Navidad, ya en el nuevo milenio.

Estaba el mendigo durmiendo sobre y bajo unos cartones, cobijado por el alero de la Iglesia de El Viñedo, cuando sintió algo duro en su regazo. Abrió los ojos rezongando y se consiguió una caja de zapatos sobre él. En medio del vapor del sueño y la resaca del aguardiente barato, sintió la humillación, la burla máxima que se le podía hacer a alguien que ya de por sí vivía al límite de la humanidad.

-¡Desgraciados!- atinó a farfullar; mas se despertó del todo de pronto, y se quedó helado. La tapa de la caja se había deslizado un poco, y podía ver dentro un par de zapaticos blancos, impolutos, de niña. Eso sí que no lo esperaba.

Con destreza se sentó y examinó la caja y los zapatos minuciosamente, sin ver nada extraordinario.

Un automóvil que pasaba por la avenida saludó a otro con un corto corneteo, y el mendigo oyó:

-¡Feliz Navidad!

Cierto. Era Nochebuena.

Tony Martínez apartó la caja a un lado y volvió a quedarse dormido al poco rato.



II

En Diciembre, el mendigo acostumbraba despertarse temprano, para aprovechar a los feligreses que venían a misas de aguinaldos; muchos daban buenas limosnas, movidos por la lástima y el deseo de apartar de su vista al mendigo inválido, y así poder pensar en sus vidas plenas de ambiciones y egoismos.

"A quién se le habrá ocurrido darme semejante regalo?", pensaba el ex-pandillero Tony Martínez, lleno de rabia, dolor y perplejidad.

Así fue como descubrió a la niña entre la multitud.

Era una chiquilla de cabello castaño, corto, mejillas redondeadas y rubicundas, y ojos pícaros con los extremos inclinados hacia abajo. Andaba sola, mas no parecía sentirse perdida. Lo más extraño era que iba vestida de blanco con unos zapatos negros y sucios.

El mendigo la miró largamente, indeciso.

"No puede ser".

La niña lo miró casualmente, y se acercó a él, manteniendo una prudente distancia. Miró sus muslos y le preguntó, un poco asustada:

-¿Te duele mucho?

-Para nada. Fue un accidente. Hace mucho- contestó, sin reprimir la primera carcajada en muchos años.

La niña lo miraba fijamente al rostro.

-¿Y eso?- le preguntó, señalando la caja.

Tony Martínez escrudiñó el rostro redondo, plétoro, inocente que tenía ante sí. Dudando, extendió la caja hacia la niña.

- Es mi regalo para tí- explicó.

-Pero, yo no te conozco- rechazó la niña, dando un paso hacia atrás.

Suavemente, el hombre deslizó la silla de ruedas con una de sus manos, ladeándola, mientras en la otra sostenía la caja de zapatos.

-Al menos mira adentro. Es un regalo para tí.

La niña tomó la caja; pero no la abrió. Justo cuando el último feligrés traspasaba la puerta de la iglesia, las campanas empezaron su melodía imponente, y la niña colocó la caja sobre los muslos del mendigo, liberando sus manos, y lo abrazó con fuerza.

-Gracias por el regalo. ¿Tú eres mi tío, verdad?

Tony Martínez, el ex-pandillero, casi sonrió. Tomó la caja y se la entregó de nuevo a la niña.

-Sí, lo soy. Vete, te estarán buscando.

La niña le sonrió una última vez, con esas sonrisas donde brilla un Universo, y se fue dando saltitos.

Ese día, un hombre sin fe ni esperanzas entendió que esos zapaticos sí eran un regalo para él.


III

Cuando me preguntan si este relato es verdadero, nunca respondo. Simplemente me dirijo al parque los Viernes en la mañana, cuando hago un alto en mi trabajo, y me encuentro con un viejo amigo a jugar ajedrez.

Sospecho que muchas veces, me deja ganar para que no abandone el ritual de oir su charla amena, alegre y ejemplar. A veces me habla de un pandillero, un antisocial sin oportunidades al cual un accidente y un par de zapatos equivocados (aunque él dice que eran los correctos) fueron la chispa que encendió la hoguera de una vida hermosa y productiva.

¿Yo? Yo lo escucho y lo observo, sin vislumbrar jamás la figura atormentada de Tony Martínez, el pandillero, el mendigo alcohólico.




viernes, diciembre 23, 2005

ENCUENTRO CERCANO

Después de múltiples peripecias familiares, el Domingo próximo pasado me encontré a bordo de mi camioneta con mi esposa, hijas y El Prócer, bloguero socializador y co-fundador de Mafia Blog, y emprendimos rumbo a La Colonia Tovar.
Yo me reía desde mis adentros, pues se trataba de otra locura más del Dr. Merengue. Me explico: el día anterior, diversos compromisos nos habían mantenido despiertos hasta la madrugada y, ese mismo día, a tempranas horas de la noche, era la celebración de la graduación (Cum Laude) de Médico Cirujano de una sobrina. Todas estas razones deberían ser suficientes para disuadirme del viaje, pero como le tengo a la razón pura el mismo apego que a los políticos, en poco más de dos horas llegamos.

Bajo un Sol de justicia, capitaneados por Nelson, (quien , con su natural bonhomía, había traído, cual Santa Tropical, un cotillón de dulces para cada uno). encontré en la plaza, inusualmente libre de palomas, a la muy risueña Phases Moon, de linda y perenne sonrisa, Depeco y su hermano menor, cumpliendo su nada envidiable rol de guardaespaldas filial, aún cuando Depeco le hacía saber de vez en cuando quién estaba al mando, y a Gus er Cura, a quien, de no conocerle por sus escritos, me habría sorprendido por su ecuanimidad y fé en Dios (Aprovechó de matar un tigrito y confesó a alguien por allí; creo que podría ser demandado, pues el chico no es sacerdote).






Otra vez tuve que oir el consabido "¿En verdad eres Protheus? Yo creía que eras más... Viejo; digo, serio. Como escribes esas cosas taaan serias." Veo que, cuando soy bromista, o no me leen, o no logro mi cometido. Uf.

Después de nosotros llegaron Topocho y su esposa Maléfica, él todo un caballero; ella toda una dama, agradables y transparentes. Luego llegó el Bloguero Canguro con su cría en la bolsa y su esposa resignada a soportar a la fauna bloguera por un rato. Novato -todo un veterano; se hace llamar así para despistar- llegó jurando que él se había levantado antes que el gallo, que las colas, etc. Magoo llegó con su hija Ariadna en los hombros y su pareja; al verlo no me sentí más Gulliver, sino uno más. Me saludó cordialmente y no paró de bromear con viejos y nuevos amigos.

La nota triste fue saber que Pansy y Hily habían tenido problemas con el avión y se habían regresado a su hangar. Sabemos que fue un problema con uno de los motores. No quiero ser indiscreto, pero desde ese día anda un parapentista desaparecido: apenas encontraron una billetera hecha picadillo.

De último llegó Marole con tres familiares (por si acaso, como aquí te sacan los órganos y esas cosas). Tras los saludos y fotos de rigor, decidimos dejar solo al busto de Simón Bolívar de la plaza, el cual tenía cierto parecido con nuestro Prócer e ir a un restaurant cuyo nombre aún practico, a ver si lo puedo pronunciar.







Una vez sentados empezó la conversación. El grueso de los blogueros eran capitalinos y conocidos entre sí, por lo cual la integración se fue haciendo a ráfagas, interrumpiendo el hilo de la costumbre. Las cervezas, de buena calidad, pero tibias para el gusto criollo (En Alemania las beben al natural, creo), dieron paso a la dieta baja en grasas: Topocho and Company despacharon unas rodillas de cochino, a las cuales ni mi técnicas de artroscopia podrían domar, y el resto comió el plato típico alemán, consistente en par de salchichas, chuleta y repollo agrio, ante el cual nuestro Prócer capituló y entregó hasta la bandera en señal de rendición. Alemanes 1, Mafia Blog 0.

-¿Para qué sirven esos encuentros blogueros?- me preguntáron dos personas.

Yo los miré, y palabras atemporales vinieron a mí:

-¿Cuál es la utilidad, para qué sirve un recién nacido?

Todos nos despedimos y regresamos a nuestros hogares.
Hasta una nueva y pronta ocasión.

(Nota: pretendí hacer un artículo jocoso, respetuoso de todo y todos. Alguna omisión o exceso, es inocente, involuntario y perdonable, espero).

miércoles, diciembre 21, 2005

NIETZSCHE HA MUERTO

El 15 de Octubre de 1844, nace en Turingia, del antiguo reino sajón, en ese entonces perteneciente a Prusia, Friedrich Wilhelm Nietzsche, llamado así por su padre, ferviente monárquico, en honor al rey, quien celebraba su onomástico ese día.

Padre y abuelo paterno eran pastores luteranos, estrictos y patriarcales. En su hogar vivían sus padres, su abuela y dos tías paternas. A los dos años nace su hermana Elisabeth y, a los cuatro, Joseph, su hermano.

En Julio de 1849 muere su padre de "reblandecimiento cerebral" y, seis meses más tarde, muere su hermano. Un nuevo pastor llega al pueblo y la familia tiene que marcharse a Naumburg, estudiando en el instituto local durante cuatro años, 1854-1858. Ya inicia a experimentar la presión familiar por abrazar el clericato, como su padre y su abuelo antes que él. En esa época sus`profesores lo consideran poco dotado intelectualmente, debido a sus problemas en la comprensión del griego. Empieza a dormir pocas horas, y a componer música y a ejecutarla con evidente virtuosismo, amén de escribir poesía. Dolores de cabeza incapacitantes le hacen perder el último semestre de estudios. Ese año de 1858 indaga sobre su familia y sobre sí mismo y, en un gesto de arrogancia y arrebato, características que marcaron su existencia, inicia su autobiografía. Consigue una beca para culminar su bachillerato en Pforta, un elitista y estricto internado.

En 1862 las cefaleas y dolores "reumáticos", muy probablemente Sífilis Congénita, lo alejan de los estudios. En 1864 egresa de Pforta resentido con un profesor, quien, ante el fervor contemplativo de Nietzsche (FN, en adelante) por un poeta llamado Hölderlin, a quien alaba como semidiós, le da a FN el "consejo amistoso de aficionarse a un poeta más sano, más claro y más alemán."

En 1864 el dolor de la muerte de padre y hermano, la separación de sus tías, los problemas de salud y la presión de madre y hermana por verlo de clérigo, estallan en Bonn, donde iniciaba estudios de Teología. Lecturas sobre el cristianismo "histórico" y la dupla nociva monarquía-líderes religiosos, lo alejan de la fe. En Octubre de ese año se aprovecha de la ruptura definitiva entre dos de sus profesores, Otto Jahn y Ritschl, para viajar acompañado del segundo de ellos hasta Leipzig a estudiar Filología (el estudio científico de la lengua y la literatura de un pueblo mediante la crítica textual). FN lo deja todo por una personalidad como la de Ritschl, una constante en su vida, insisto.








FN va radicalizando su pensamiento y sus apegos; de tal manera que en esa época nace su obsesión por Wagner, el músico, a quien enzalsaría con la misma vehemencia con la cual luego le destrozaría en sus escritos. En 1869, dado el apoyo irrestricto de dos de sus maestros, obtiene sin ser doctor y sin oposición la cátedra de Literatura Griega. Poco después, Leipzig, sin examen ni tesis lo doctora, basándose en un ensayo suyo, denostado por sus colegas filólogos. A partir de ese año, y sobre todo en 1872, FN es rebatido por sus colegas, molestos por el fervor rayano en el fanatismo y el estilo poético, pseudo-científico, de sus escritos. Por encantamiento con una dama wagneriana y feminista, evoluciona sus pensamientos hacia los filósofos pre-socráticos, al tiempo que la dama rechaza sus proposiciones matrimoniales. Tras múltiples rechazos femeninos a sus pretensiones nupciales, decide casarse "con la primera que pase por la calle".

En 1877 enferma de gravedad y se le aconseja alejarse de la lectura y de la escritura. Enterado Wagner del diagnóstico del médico, dice que la enfermedad de FN es debida al "onanismo" compulsivo y a una "antinatural pederastia". Estas afirmaciones ponen punto final al fanatismo de FN hacia Wagner.

Hasta ese entonces, todos los escritos nietzscheanos habían contado con la promoción y financiamiento del editor de Wagner. En 1878 FN publica Humano, Demasiado Humano, sin apoyo de dicho editor y seis años después del fin de su meteórica carrera filológica, y fracasa rotundamente. Regaló a sus amistades los 40 libros publicados.

Por "problemas graves de salud" es jubilado en 1879, antes de los 35 años de edad, y se dedica de lleno a viajar y a escribir.

Su interpretación ERRADA de la Evolución darwiniana (Nietzsche creía, o hacía creer a los demás, que el término evolución era sinónimo de progreso, y que las especies evolucionan hacia la mejoría, hacia la excelencia; en realidad, evolución habla de cambio a secas, sin peor ni mejor, y se sabe que las especies evolucionan todas, unas sobreviven, otras no. A veces, como los dinosaurios, las especies mejores desaparecen por eventos fortuitos) lo llevó, en otro de sus frenesíes, a plantear la utilidad, la bondad y la humildad eran valores burgueses para dar el poder a los débiles, y contrapuso al "superhombre", instintivo, libre, fuerte, con voluntad para dominar a los demás. Este superhombre no necesita dios alguno, es autosuficiente, por lo cual FN acuña su famoso "Dios ha muerto". Su pensamiento cambia un poco y habla de la circularidad de la historia, la Teoría Pendular, donde la historia se repite sin cesar. ¿Dónde cabe el superhombre en ese concepto y en la Teoría de la Evolución?

Luego de su Eterno Retorno, donde FN denosta la razón y la suprime a favor de la voluntad vitalista, vuelve a elogiar a la razón en Humano, Demasiado Humano, encarnándola en Voltaire.

La doctrina absolutista, excluyente, de Nietzsche, ha sido caldo de cultivo ideal para los nazis, quienes vieron en el Superhombre nietzscheano al ario perfecto, y a los chicos malos de Engels y Marx, quienes interpretaron, doblándole el brazo hasta rompérselo, a Hegel (el único filósofo que detesto más que a Nietzsche) y a Darwin. Ese estado represivo, controlador, omnipresente y el cual dicta que tú eres feliz y te callas la boca, es la representación del superhombre-institución, encarnado en aquella época -cómo no- por sus padres, Engels y Marx, además de sus acólitos.

Demasiado humanos... para mi gusto, Federico.

jueves, diciembre 15, 2005

Cumpleaños





Un joven cumple 57 años mañana, 16 de Diciembre.
En 1931, en New York, durante la Gran Depresión, Mosher butts, residente de Poughkeepsie, perdió su trabajo. esto le permitió dedicarse a los juegos de palabras, su pasión durante toda su existencia. Los juegos de azar, como los dados, no le atraían, porque las destrezas del jugador nada aportaban.
Y juegos como el ajedrez le parecían algo aburridos y lejos del alcance del común de la gente.

Así fue como ese mismo año de 1931 ideó un juego de palabras, sin tablero, con letras en madera. La patente le fue negada repetidas veces.

Butts se dio cuenta que la letra S faciltaba el formar nuevas palabras, y decidió disminuir su número a cuatro. A esta conclusión llegó usando la portada del New York Times.

En 1938, y debido a su gusto por los crucigramas, decidió la adición de un tablero al juego, el cual entonces contaba con demasiadas reglas, por lo cual Parker Brothers y Milton Bradley desestimaron su compra, error que pagarían muy caro.

James Brunot, un amigo de Butts que había recibido uno de los juegos hecho a mano por su amigo, decidió dar el espaldarazo al juego. Compró la comercialización del mismo a Butts, garantizándole royalties por cada juego vendido y simplificó las reglas del mismo. El nombre, cambiado varias veces, en ese año de 1948 era Criss-Crosswords, fue finalmente acuñado como Scrabble.

El resto es historia.


Sting, Keanu Reeves, la reina Isabel II, los rusos y los presos de una cárcel húngara -quienes hasta campeonato tienen - disfrutan de este juego divertido, donde el azar y el saber, como en la vida, se mezclan. Y, como en la vida, la pugnacidad suele acabar en risas y nuevas amistades, mientras se aprenden palabras... Y hasta se inventan algunas.

Este joven goza de buena salud, con más de 100 millones de juegos vendidos en 29 idiomas... y la cuenta sigue.

martes, diciembre 13, 2005

LETRAZOS


El extravío definitivo del palindrómico libro Oir a Darío de mi biblioteca personal, marca el fin de una etapa de mi vida, en la cual, aguijoneado por el hcho de ser un ambidextro con tintes de siniestralidad, exploré las curiosidades de este idioma al cual amo, y que es el 50% de mi agradecimiento a la madre patria, junto con el catolicismo, que conforma mi personal 50% restante.

Para zambullirnos en este nostálgico momento, he de aclarar términos.

Las palabras polisémicas son aquellas que tiene varios significados. Así, la Antanaclasis es una figura retórica que consiste en repetir polisemias con sentidos diferentes, en un caso clásico de "no aclares, que oscurece".

Góngora escribió:

Cruzados hacen cruzados,
escudos pintan escudos,
y tahúres muy desnudos
con dados ganan ducados
y coronas Majestad.
¡Verdad!

Imagino que este señor estab lejos de los nobles de su territorio cuando escribió esto.





Aquí en Venezuela, la cosa se puso dramática con el abuso en el género de las palabras, y ahora se especifica en cada discurso entre médicos y médicas, abogadas y abogados, herreros y herreras, postes y postas (!), casas y casos, etcétera y etcétero. Seguro que la culpa es de Isabel Allende, digo yo.

Pero mi libro perdido era sobre los palíndromos. El Palíndromo viene del griego palin= otra vez, y de dromos= carrera; pero mejor que definir es disfrutar y aprender, así que allá voy:

Adán no callaron nada./ Adán no cede con Eva y Yavé no cede con nada./ A la Manuela dale una mala./ Alí tomó tila./ Allí ves, Sevilla./ Aman a Panamá./ A Mercedes ese de crema./ Amad a la dama./ A mamá Roma le aviva el amor a papá y a papá Roma le aviva el amor a mamá.
(...)

Y seguía. Personajes como Miguel Angel, Cortázar y Dante, entre muchos otros, han hecho palíndromos, y Julio González C., escribió un poema de excelente factura, del cual reproduzco su primera estrofa.

LUZ AZUL
1991

Arde ya la yedra,
la moral, claro mal.
No deseo yo ese don,
la tomo como tal.
No traces en ese cartón
la ruta natural.

Nuestro idioma es rico, variado, hermoso y divertido. La poesía es la música de las palabras. Vamos todos a disfrutar del regalo del lenguaje, en cualquiera de sus formas.



domingo, diciembre 11, 2005

BAJATE DE LA ESCOBA, HARRY


Sí, a pesar de las advertencias, fui a ver la última entrega de Harry Potter.
No. No soy fanático de los libros que le han dado vida y salud.
Enonces, ¿qué hacía yo en la oscura sala de cine sufriendo? Nada, la curiosidad.

La película es una desenfrenada galería de sketchs unidos por interminables escenas de relleno. Y punto. No me vengan con paralelismos a cosmogonías antiguas, referencias de lujo a mitos ancestrales ni nada de eso; por favor, ni toquen delirios oníricos atávicos, ni osen insinuar referencias a grandes interrogantes de la humanidad. Nada de nada. La señora madre de Harry y la Warner solo han visto dinero, vil y perseguido dinero, señores. Lo más grave, y lo que insulta mi inteligencia, es que te lo dicen en la cara. "Mira cómo te dejo con cara de idiota viendo este bodrio mientras cuento tus billetes tras el telón", parecía oir yo a los quince minutos de película.

No se crean que solo me gustan películas de existencialismo o filmes alemanes de corte filosófico, y que desprecio el cine comercial. Nada más alejado de la realidad. Lo que ocurre, amigo o amiga lectores, es que no basta que los efectos especiales sean buenos o que reúnas actores de primera, ni que bases tu obra en un libro y autor famosos -El Resplandor apenas tenía el título de la película de Stephen King, pues en nada se parecía al libro; sin embargo, fue un buen "divorcio- , no. Además el guión debe ser excelente, plausible y ser adaptado al cine, no un esclavo del libro, eo cual ya de por sí está escrito pensando en la gran pantalla. Ser fiel al libro original no solamente no siempre es bueno: en este caso, fue catastrófico. Yo tengo suficiente imaginación. No necesito que me den ilustraciones del libro animadas y encima me digan que me trague que es una película de antología.

Por respeto a quienes no la han visto aún y, como yo, son tan tozudos como para verla desoyendo advertencias, no enumero las debilidades del filme.

No digan que no se los advertí.

miércoles, diciembre 07, 2005

JUGUETEO




Desde hace luengos años, compañías como la Fisher-Price y la Mattel se han convertido en las ladronas de mi alegría navideña: el Grinch de mis Navidades.
¿Por qué, se preguntará el agudo lector, si sus juguetes son excelentes, hasta educativos?

No sin rubor he de confesar que, este caso particular parece ser el único en mi historia personal, en el cual debo decir que la calidad me ofende. Sí, es cierto. Añoro esos juguetes que el Niño Jesús me regalaba y se rompían o se descomponían antes que me hartara de ellos o perdieran el encanto para pasar a ser un objeto anodino en algún cajón con telarañas. Hoy me parece una hermosa lección de vida recordar esos juguetes de mis sueños infantiles, enseñándome lo efímero de la vida humana, el cierre de un ciclo, la pérdida inevitable que me acompañaría todo el camino, lo frágil e irreal de la vanidad con la cual paseamos nuestros regalos frente a otros niños, cuando su destino final sería el basurero, lo ilusorio que es posar tu cariño en lo que, un día u otro, va a desaparecer sin dejar huella. Me enseñaron que lo que vale la pena se construye con amor y sacrificio, no con plástico.

En gran medida, gracias a esos viejos juguetes con fecha de caducidad, he aprendido que es9os juguetes de adultos: un auto nuevo, una casa, joyas, electrónicos, el dinero desnudo como esos muñecos sin ropa... se van, a veces sin volver. Y son una ilusión, una gran mentira. Aprendí que nuestra vida terrena tiene un final y un fin, una fecha no escrita, siempre demasiado cercana; las cosas hermosas pasan, las terribles también. Solo quedan nuestros actos y sus consecuencias.

Pero no. Ahora hasbro, Fisher-Price, Mattel, fabrican juguetes que duran cincuenta años sin siquiera perder su color.
Así, un día llega tu mamá de revisar el desván y te entrega un cubo de plástico con las caras de unos muñecos feísimos y desconocidos y te dice: "Mira, Protheito, este juguete era de tu abuelito Protheus cuando tenía dos años", y compruebas con horror que tu abuelito no es ese viejito sabio, consentidor y divertido, sino un niñito baboso y medio estúpido que se la pasaba mordisqueando -se pueden ver las impresiones dentales por todo el cubo- y babeando sobre un artefacto inútil, sin pilas, sin sonido y que no vuela.

¡Por favor, un alma altruista que demande a esas compañías!

Añoro esos tanques de guerra que traían una marcha, la cual dejaba de sonar apenas yo la aprendía; entonces era el turno mío de tararearla hasta el cansancio; poco después se dañaba el motorcito que lo impulsaba, y mis manecitas entonces lo hacían ir en maniobras imposibles por el patio de mi casona vieja y encantada. Finalmente, el tanque moría, y mi belicismo infantil con él. Ya no habían soldados grises para matar, ni verdes que rescatar. Pasaba entonces a mi época de Llanero Solitario, con un palo de escoba que en su punta exhibía una cabeza equina de fieltro, confección con derechos reservados de las tías ancianas de mi mamá. Jamás Babieca vivió tales aventuras, ni Pegaso vio tanto mundo, como mi caballito de fieltro y madera en sus galopadas por los pasillos de mi hogar. Ni hablar de mis decenas de avioncitos de papel decorados por mí, bautizados por mí. Ningún astronauta podría contar las maravillas que viví de niño, cuando mi mente volaba más allá del Universo, mientras relataba a mi padre las aventuras de mi nave de papel bond.
La fiesta cuando llovía era grande, dejando deslizarse los barquitos de papel por el torrente de la calle... hasta la primera alcantarilla, donde el remolino de Nemo los engullía. O cuando tapábamos la alcantarilla del patio interno de la casa y se formmaba un charquillo que aún hoy se me antoja un océano, y luchaba a mano limpia contra monstruos marinos, que caían indefectiblemente derrotados.

¿Adónde se fueron los aviones de papel, el palito mantequillero, la ere, la perinola? ¿será que Mario Bros, Counter Strike y todos esos juegos de video hicieron como la electricidad, que acabó con los fantasmas de antaño? O estamos viendo el telescopio por el extremo equivocado, y son esos juegos de video y juguetes automatizados los fantasmas y aparecidos.

Ya saben. A comprar juguetes perecederos, con magia en su interior.

sábado, diciembre 03, 2005

TAREA

Ahora sí, descubrieron el otro yo del Dr. Merengue.
Un par de damas blogueras solicitaron responda a una encuesta que sacaría a flote mi diablillo personal.
No las dejaré sin respuesta, como buen caballero.

Estás atrapado en Fahreit 451: ¿Cuál libro te gustaría ser?
Edad Prohibida, de Torcuato Luca de Tena, o Verano del 42, de Herman Raucher.

¿Alguna vez te enamoraste de un personaje de ficción?
De Campanita, de Peter Pan, y de Barbarella, la comiquita que salía en la revista Bohemia. Eso sí que era erotismo, ¡mamá!

¿El último libro que compraste?
Crónicas de Narnia: El león. La bruja. El ropero.

¿El último libro que leiste?
Robinson Crusoe, de Dafoe, por quinta o sexta vez. Empecé leyendo el prólogo y, como no podía dormir, me leí sesenta páginas esa noche y no paré hasta terminarlo.

Cinco libros que llevarías a una isla desierta:
La Isla Misteriosa, de Jules Verne.
Lentejuelas, de Gary Jennings.
Los Viajes de Jaimie Mc Peters, de Robert Lewis Taylor.
El Ascenso del Hombre, de Bronowsky.
Leonardo, biografía de Da Vinci, de varios autores.
La Biblia.
El Principito.
Cuentos de Andersen y Perrault.
La Llamada de la Selva, de Jack London.
El Señor de los Anillos, de Tolkien.
Eeeeehhh... ¿dijeron cinco?

Por allí andaba una encuesta de música. La adapté a mí mismo, y la respondo:

Grupos favoritos:
Queen.
The Beatles.
The Commodores.
Supertramp.
U2.
Rolling Stones.
Etc,etc,etc.

Cantantes:
Enya.
Elton Jhon.
Barbra Streisand.
Celine Dion.
Tina Turner.
Donna Summer (Love to love you, baby!)
Simón Díaz.
Etc.

5 canciones:
Still, de Lionel Ritchie.
We are the champions, de Queen.
Jumpin' Jack Flash, de Rolling Stones.
I don't wanna miss a thing, de S. Tyler.
Madrigal, de Danny Rivera.
Born in the USA, de Bruce Springsteen.
Who wants to live forever, de Queen.
Tiempo, de Aditus.
¿Eran cinco?

Te traen más recuerdos:
La música disco, sobre todo la de Fiebre del Sábado por la Noche y subsiguientes.

Te identificas:
No te Pueden Apagar, de Témpano.

No veo al diablito aún. ¿Ustedes sí?

jueves, diciembre 01, 2005

Fraude Electrónico





Hoy decidí ir a la tienda de artículos electrónicos a preguntar los precios de los televisores. Apenas traspuse la puerta, un joven vendedor, sonrisa amplia e inamovible, brazos que se movían en abrazos al aire y voz seductora, hablaba sobre la próxima generación de aparatos a un pequeño grupo de damas. Alcancé a oir que pronto las neveras sabrían si faltaba leche y la pedirían vía Internet a la panadería, las balanzas reportarían nuestro peso directamente al gimnasio o a nuestro dietista, y la TV por cable sabría, gracias a datos de nuestra mano al tocar el control, cuál programación nos agrada y cuál no; más aún, gracias a un scaner del rostro, sabrán cuáles propagandas ejercen mayor influencia en nosotros.
De inmediato me fui a trabajar, y dejé al joven con sus disertaciones.

En mi casa tengo un control remoto para la TV de 47 botones, la mitad de los cuales no me atrevo siquiera a tocar. Sumen a eso 38 botones del VHS, 35 más que me instaló el chico del cable, como si necesitase más, y los futuros botones del blu-ray y del HD-DVD, dos formatos nuevos e incompatibles de discos de video. Las siglas que acompañan los botones parecen sacadas de códigos secretos de la NASA: PIP, JUMP, ESC, VTR, TRBK, MTS... Parecen siglas de bombas apocalípticas. Espero pronto me crezcan nuevas y más hábiles manos, para estar a la altura.

Ahora, ¿te imaginas aumentar un par de kilos y que en el gimnasio te reciban gritando "¡Oinc, oinc!, qué comiste el fin de semana, cerdito?" ¿O que la nevera se autobloquee porque te pasaste en 30 calorías y no abra su puerta hasta el día siguiente?

Imagínense ahora que el televisor pueda verte. ¿Cómo se sentiría una dama ligera de ropas frente a la pantalla, o con una máscara de pepinillos dispuesta a roncar de lo lindo? ¿No temería aparecer algún día en esos programas de capturados en video? Lo peor: ¿será nuestro destino discutir con la plancha sobre la calidad del filo de nuestros pantalones, o lloriquearle al lavaplatos porque considera que ensuciamos mucha vajilla?




Si la aspiradora se queja por el sucio que arrastramos con los pies desde la calle, ¿qué será de unas esposas que tendrán quienes se quejen por ellas? Me aterra ese pensamiento.
Si el día de mañana un robot cuelga cuadros y lava autos por mí, ¿sobre qué versarán las críticas en mi contra? Es capaz que, llegado el momento, encuentren una crítica razonable, y sea mi fin.

Otra posibilidad es que la próxima generación sea la última de la raza humana, y perezca asfixiada por una montaña de controles de todos los aparatos inteligentes más alta que el Everest. Y, a fin de cuentas, ¿para qué quiere alguien un aparato más inteligente que él, a menos que sea para inventar excusas, que es para lo que el ser humano aguza más el ingenio? Una licuadora Físico Nuclear debe ser más aburrida que soportar a una nevera obligándote a tomar leche a diario, cuando al ser humano le gusta el cambio, la sorpresa, el no saberlo todo, y podría provocarle un buen vaso de jugo de naranja recién exprimido por una mano imperfecta, no tan inteligente, pero digna de ser amada.

Quid pro quo.

lunes, noviembre 28, 2005

A Elegir (?)




En Marzo de 1927, frente a sendos vasos de limonada, el profesor de gimnasia John Thomas Scopes, quien impartía ocasionalmente clases de Matemáticas... y de Biología, junto a un par de personalidades del pueblo Dayton, de Tennessee , tramaron un plan para publicitar al pueblo y atraer el turismo, que pronto se salió de sus manos y mantuvo en vilo a la nación entera.

Hacía poco la legislatura del estado había promulgado sin gran aspaviento una ley que prohibía enseñar en las escuelas públicas toda teoría "que contradiga la historia de la creación divina del hombre tal cual lo enseña la Biblia". El trío tramó cuidadosamente la conspiración: Scopes fue denunciado por ciudadanos "alarmados" ante un delito evolucionista, al ser hallado in fraganti enseñando la doctrina darwiniana. detenido e inculpado, la bola de nieve se deslizó insensible pero inexorablemente.

"Dios o el gorila, hay que elegir", fue la consigna de los creacionistas, quienes veían en la evolución todos los males de la vida moderna. Recordemos el fundamentalismo protestante de la época, que interpretaba literalmente la Biblia y execraba a quienes osasen pensar diferente a ellos.

El juicio atrajo, en efecto, a cientos de reporteros, medios impresos, radio, cine, teléfono -la Western Union instaló 10 líneas telefónicas- y hasta la reciente telegrafía inalámbrica. Para deleite de los conspiradores, se implementó una pista de aterrizaje y corrales para caballos y mulas.

El juicio inició con un fiscal, Williams jennings Bryan, fundamentalista campeón bíblico del pueblo, gran orador y terror de los pecadores, y con un abogado defensor llamado Darrow, de lengua igualmente liviana.

En un local abarrotado de gente primero, al aire libre después, el juicio dio un vuelco sensible cuando el juez impidió que notables científicos salieran en defensa de la doctrina de la evolución. La causa de la defensa parecía irremediablemente perdida, y Scopes no veía ya tan graciosa su osadía, enfrentando caer de narices en una celda por largo tiempo.

Pero Darrow pasmó a todos citando como testigo... ¡al fiscal W. Bryan!
Podrían haberse negado, pero Darrow adujo que lo citaba como "experto bíblico", y el ego abultado del fiscal permitió que mordiera el anzuelo. Bryan había publicado numerosas veces textos sobre la verdad evangélica, y tenía acólitos que le seguían ciegamente en todo el pueblo. ¿Cómo negarse? ¿Qué podía pasarle?







Darrow: ¿Debe interpretarse la Biblia literalmente?
Bryan: Sí, aunque cuando Jesús dice que somos "la sal de la tierra", debe interpretarse en sentido figurado, como otros pasajes.
D: ¿Detuvo Josué el Sol para prolongar el día?
B: La Biblia es inspiración divina, escrito para ser comprendido por la gente de la época.
D: Entonces, el Sol gira alrededor de la Tierra; según usted, lo dijo Dios, pues dice que el Sol "se detuvo" al dar la vuelta a la Tierra.
B: Cada quien puede interpretar ese pasaje a su libre albedrío. No sabemos cuál es la verdad.
D: Eso hacen los evolucionistas, señor Bryan.

La sala se removió inquieta. Los segudores de Bryan de la Liga Anti-evolución, se sentían incómodos.

D: ¿Se creó la tierra en seis días, señor Bryan?
B: Sí.
D: ¿De 24 horas esos días?
B: No. Creo que puede interpretarse como períodos.
Bryan sudaba, y los murmullos crecían. Algunos le clavaban miradas de furia.
D: Cito la Biblia: "Y fue la tarde y la mañana el día primero". ¿Cómo se sucedieron estos, si el Sol se creó al cuarto día?
B: Habla de períodos, y no necesariamente en orden.
D: Esos períodos, ¿podrían ser de millones de años?
B: Sí- dijo. Y la idea principal de los antievolucionistas, según la cual la Tierra tendría poco más de 4000 años, se desvaneció.

Al final, Scopes pagó $50, Dayton continuó siendo un pueblito pobre del Sur de EEUU y el Proceso Scopes pasó a la historia como una farsa entre dos bandos legos, aún cuando alguno debía tener razón.

martes, noviembre 22, 2005

Cantos de la Experiencia.

La tarde era hermosa, con una lluvia pertinaz que resbalaba por los vidrios frente a mi escritorio, velando como una cortina con vida propia el paisaje de cerros y edificios que se abría ante mí.

De pronto, mi secretaria me hace pasar, muy solemnemente, a un señor de edad madura con su hijo, un treinteañero con aires de aburrido.

-El Doctor Q. y su padre - los introduce ella.

La luz roja se enciende en mi mente desde el primer vistazo.
El padre, vestido de impecable flux, entra al consultorio con rostro de perdonavidas, acariciando con su mano derecha, donde ostenta dos anillos (uno de abogado y otro de ricachón) la corbata de seda inmaculada, con ese nudo asimétrico y pomposo que me provoca náuseas. Windsor, perdiste tu tiempo. Me estrecha la mano con fuerza excesiva e intentando pronar mi antebrazo. Impido que ocurra esto último y, antes que lo indique, se deja caer en la silla frente a mí.
Con el hijo me ocurre lo mismo, pero por motivos diferentes. Es un hombre intentando parecer muchacho. Usa su cabello rubio (aclarado) largo, rizado y poco o nada peinado, a lo David Bisbal. Usa una camisa de colores fuertes, estampada de motivos playeros, por fuera de unos shorts muy largos o unos pantalones muy cortos, no sé. Zapatillas de velerismo, sin medias. Su mano, estirada con lentitud fingiendo desgano, parece un pescado muerto entre la mía.

-Dr. R., vengo a Ud. fuertemente (sic) recomendado por el Dr. M. y el Sr. M., su tío, a fines de solicitarle enseñe Artroscopia a mi hijo, quien acaba de regresar de Oxford, donde perfeccionaba su inglés. Mi hijo fue graduado con las más altas....

Así estuvo el hombre, disertando por unos cinco minutos en un soliloquio de alabanzas y pedanterías hacia su vástago, quien nunca cruzó mirada con ninguno de los presentes. Ya finalizando, el hombre acertó a puntualizar:

-Y quiero que sepa, Dr., que no acepto un no como respuesta, considerando que la relación profesional se verá recíprocamente alimentada, ya que mi hijo A. es un profesional de excepción.

Una vez que mi mandíbula regresó del suelo a su sitio original, invertí cinco minutos en explicar que el cupo de médicos para operar conmigo estaba completo por este año, que me llamaran el próximo, y otras excusas, todas ciertas.
Visiblemente molestos, padre e hijo se marcharon.




Y pensé.

"Para ver el mundo en un grano de arena,
y ver el Cielo en una flor silvestre,
abarca el Infinito en la palma de tu mano
y la Eternidad en una hora.

Aquel que se liga a una alegría
hace esfumar el fluir de la vida;
aquel quien besa la joya cuando cruza su camino
vive en el amanecer de la Eternidad"

William Blake.

Este padre había apartado hasta entonces toda piedra del camino de su hijo. Lo guía, lo controla, lo anula y lo mima como si fuese alguien por encima de todos los demás, sin saber, sin sospechar que, seguramente, algún día, ese hijo tendrá que valerse por sí mismo. Pero cuando quiera desplegar las alas, se habrá pasado el tiempo de aprender a volar.

Nadie quiere sufrir. Nadie quiere ver sufrir a otros, a menos que tenga algún problema mental. Pero la cosa parece haberse salido de control. Hoy te dicen que vivas, que goces, Hakuna matata, don´t worry, be happy, cero compromiso, porque duele, cero altruismo, porque duele y no da caché.

"Soy un insignificante madero abandonado por la marea
un puñado de arena y hojas muertas
me confundo con la arena y restos de naufragios.
¡Oh!, desconcertado, frustrado, humillado hasta el polvo,
oprimido por el peso de mí mismo
pues me he atrevido a abrir la boca"

Las familias ya no quieren educar a sus hijos, que los eduque el colegio; los colegios se limitan a cumplir un programa del Gobierno; que los eduque la Iglesia. La Iglesia los devuelve con sus padres. Recuerdo mi casa grande y poblada de adultos, todos y cada uno con un consejo, una guía, un buen ejemplo. Recuerdo a las tías solteronas de mi madre, recitando "Quo Vadis" de memoria, mientras hacían cualquier labor. Recuerdo a Miguel, el señor del kiosko cerca de la casa quien, al verme llegar a la esquina, niño yo de unos siete años, salía a todo vapor de su lugar de trabajo y me daba la mano para ayudarme a cruzar la calle, repitiendo el proceso luego que le comprara los suplementos de Superman y me diese el vuelto del dinero, siempre exacto. ¿Adónde se fue todo eso? ¿Qué nos pasó, que dejamos nos arrebataran esa inocencia, Dios?

"Aquel hombre había matado lo que amaba, y por ello iba a morir. Aunque todos los hombres matan lo que aman, que lo oiga el mundo, unos lo hacen con una mirada amarga, otros con una palabra zalamera; el cobarde, con un beso, ¡el valiente con una espada! Unos matan su amor cuando son jóvenes, y otros cuando son viejos; unos lo ahorcan con manos de lujuria, otros con manos de oro; el más piadoso usa un cuchillo, pues así el muerto se enfría antes. Unos aman muy poco, otros demasiado, algunos venden y otros compran; unos dan muerte con muchas lágrimas y otros, sin un suspiro; pero aunque todos los hombres matan lo que aman, no todos deben morir por ello."

Oscar Wilde.



Me preocupa de sobremanera que el hombre se dedique a juzgar, clasificar, apartar y denostar, echando su propia humanidad a la basura. Peor aún, ahora también le huimos a todo lo que consideramos sufrimiento. Jesucristo, Ghandi, Luther King, Darwin, Da Vinci, Mendel, y muchos otros, habrían sido nadie, si hubiesen hecho válido ese modo de pensar.

Herakles (Hércules) fue una vez llamado a escoger entre una placentera vida anónima y el camino sacrificado del esfuerzo y de la ulterior gloria, si se la ganaba. Adivinen su escogencia.


domingo, noviembre 20, 2005

MISION NO CUMPLIDA



Poco queda por decir acerca de Jules Verne, creador de la Novela Geográfica, escritor científico, estudioso de las tecnologías que emergían luego de la Revolución Inglesa, la Revolución Industrial. Un hombre que alimentó mi pasión por las novelas desde mis 9 años de edad.

Su libro Viaje al Centro de la Tierra es el único que no ha sido llevado a cabo. Pero no era de temerse, pues el propio Verne "decapitó" la aventura, y los personajes de su novela fueron vomitados por un volcán sin llegar al centro. El escritor ya sabía de las enormes dificultades, conocidas e intuídas, para llevar a buen término semejante empresa.

El libro versa sobre el profesor Otto Lidenbrock, sabio mineralogista alemán, quien descubre un criptograma (Recurso literario de moda entre escritores de esa generación. E.A. Poe lo usa en varios de sus escritos, por ejemplo)escrito en latín con caracteres rúnicos, el cual, una vez descifrado, da la clave para conseguir una vía al centro de la Tierra. Narra la novela el sobrino del profesor, Axel, joven enamorado de Graüben, otra sobrina del profesor, quien empuja a un reticente Axel a la aventura bajo la promesa de, una vez coronada la empresa, casarse con él. "Vas a emprender un hermoso viaje", le dice la joven. "¡Siempre está bien que un hombre se haya distinguido por alguna empresa!" Esta relación amorosa que afianza el destino de un hombre es inusual en Verne; yo la veo más como una invitación a un hombre de condición inferior a ganarse su puesto como cortejador ante la sociedad, que como una muestra de sensibilidad hacia lo femenino de Verne.

De esta forma, profesor y sobrino marchan a Islandia, para iniciar el descenso en una chimenea del volcán Sneffels. Antes de iniciar semejante empresa, reclutan a un recolector de plumas de edredón. La paradoja verniana de atribuir un oficio banal a este personaje llamado Hans Bjelke, es una metáfora de su propia condición. Verne era ya famoso y adinerado, y personajes envidiosos, desde la oscuridad del anonimato o desde posiciones más allá del alcance del escritor, se habían dado a la tarea de banalizar su oficio, tratándolo de plagiario y de copiar ideas de otros, sin ser una novedad. En justicia he de decir que verne JAMAS pretendió ni insinuó ser un visionario, pionero ni inventor. Tomaba ideas de proyectos o máquinas ya existentes y las llevaba a una sólida y amena narración. Pero la envidia es gratis y dolorosa. Hans es un personaje estoico; nunca se queja, no reacciona con miedo ante el peligro; salva repetidas veces la vida de sus acompañantes, casi ni habla. La descripción verniana de Hans solo tiene parangón con la de Ardan, en De la Tierra a la Luna, o la de Nemo -por contraposición, pues Nemo es visto como un antihéroe- : "Un hombre de elevada estatura, vigorosamente constituido (...) Debía estar dotado de una fuerza poco común (...) . Sus ojos inteligentes eran de un purísimo color azul. Largos cabellos, que hasta en Inglaterra pasan por rubios (Los ingleses acusaban a Verne de parecer semita, cuando el era antisemita convencido. De allí el ataque), caían sobre sus hombros atléticos. Todo en él revelaba una perfecta calma, no indolente, sino tranquila. No pedía nada a nadie..." Así hable de Hans nuestro admirado Verne. Me llama mucho la atención saber que el vocablo Hans, fonéticamente, tiene acepción de "Yo".

El trío desciende por el cráter indicado y empiezan su accidentado descenso. La cantidad de alimentos a la cual el autor se refiere, difícilmente daría para más que unos pocos días, lo cual es un fallo lamentable en la novela. Una vez descendiendo, se encuentran con luz proveniente de ¡una aurora boreal! y con un océano inmenso, en el cual observan la titánica lucha entre un ictiosaurio y un plesiosaurio, descritos erróneamente por Verne, quien se ciñó a la descripción en boga para la época.

Finalmente, se describe el encuentro con mastodontes y hombres gigantes antediluvianos, como era creencia común en ese entonces. Jules Verne describe, en el clímax de la novela, con gran maestría, el avistamiento de estos mastodontes y del gigante de 12 pies de altura (casi 4 metros). Los protagonistas huyen y, en la huída, son vomitados al exterior por la erupción de otro cráter.

Falta por mencionar un personaje capital en la novela, motor ausente de cuanto en ella acontece. El lector siente su presencia, su respiración tras los protagonistas, su embrujo y obsesión, pero nunca aparece. No es más que un nombre misterioso y terrible: Akne Saknussem. Tres siglos antes, ese islandés misterioso había hecho la travesía y había regresado para contarla. Pero sus pistas se habían perdido, excepto por el criptograma y un libro apócrifo. ¿Qué fue de él? ¿llegó al Centro, como no pudieron Axel, el profesor y Hans?

En algunas fotografías del viejo Jules Verne, se me antoja ver una sonrisa contenida y unos ojos brillantes de picardía. Provoca preguntarle: "Señor Verne, ¿llegaremos algún día?"

La aventura incumplida de Verne, aún no ha comenzado.

domingo, noviembre 13, 2005

SE LLAMA CARLOS GARDEL


I.INICIOS.

El Jueves 11 de Diciembre de 1890 nace en Tolouse, al Sur de Francia, Charles Romuald Gardès, hijo natural de Bertha Gardès. Precisamente esta ilegitimidad lleva a Charles a los dos y medio años hasta Buenos Aires. Pasa infancia y adolescencia en el barrio Mercado de Abasto, donde recibe los apodos de "El Francesito" y "El Morocho del Abasto"; les recuerdo que morocho, en Argentina, Uruguay y Paraguay sirve para designar a las personas de cabello oscuro y tez blanca.
Empieza cantando informalmente canciones "criollas" y, en 1911, conoce a un joven uruguayo, apodado "El Oriental", llamado José Razzano, con quien conforma el dúo "El Morocho y el Oriental". Este dúo permanece de 1911 hasta 1925. Charles pasa a llamarse Carlos Gardel. Este dúo, mítico, con Gardel como barítono y Razzano como tenor, cosechó numerosos éxitos en la canción campesina argentina.

II. NACE EL TANGO

En 1917, Pascual Contursi compone por vez primera una letra para un tango llamado "Lita", usando el lenguaje de los arrabales porteños, el lunfardo, narrando un triste amor:

"Cuando voy a mi cotorro
y lo veo desarreglado,
todo triste, abandonado,
me dan ganas de llorar
y me paso largo rato
campaneando tu retrato
pa' poderme consolar."

A Gardel le fascinó de inmediato el atrevimiento. Y sí, el sagaz aficionado al tango habrá reconocido la letra del tango "Mi Noche Oscura", como lo rebautizó Contursi a pedido de Gardel, quien lo graba acompañado por la guitarra de José Ricardo. "No se me da bien la orquesta; pero con la guitarra, soy otra cosa", diría.

Ese mismo año de 1917, se estrena la primera película del cine argentino, "Flor de Durazno", con un pésimo actor 120 Kg. repartidos en 1,70 m. de estatura. Meses de gimnasia, sauna y, sobre todo, fuerza de voluntad, someten al obeso sibarita hasta llevarlo a los 75 kg.

El dúo estrena en el Empire de Buenos Aires "Mi Noche Triste". El éxitazo los lleva a Chile, Uruguay y Brasil.
En 1927 José Razzano, enfermo de las cuerdas vocales y distanciado del amigo que idolatraba, abandona el dúo, sin que Gardel afronte la separación; es que, en su ser, rehuía actuar ante las responsabilidades amargas, de ser posible.

En 1931, El Zorzal Criollo, El Mudo, entra de lleno al cine, ya famoso y grande como pocos. Para la Paramount rueda en París "Luces de Buenos Aires" (Canta "Tomo y Obligo"). Conoce al guionista y compositor Alfredo Lepera, rodando "Espérame" (Canta "Me da Pena Confesarlo" y "Estudiante"), "La Casa es Seria" ("Recuerdo Malevo") y "Melodía de Arrabal" ("Melodía de Arrabal", "Cuando tú no Estás" y "Silencio").

De allí Gardel viaja a New York, donde la limitación de la barrera idiomática no lom arredró. Actúa en la radio de la NBC y rueda "Cuesta Abajo" (Canta "Cuesta Abajo", "Amores de Estudiante", "Criollita Decí que sí" y "Mi Buenos Aires Querido") y "El Tango en Broadway" ("Rubias de NY", "Caminito Soleado", "Soledad MIDI" y "Golondrinas", son sus canciones).
Alfredo Lepera compone las canciones y escribe los guiones para "El Día que me Quieras" ("El Día Que Me Quieras", "Sus Ojos Se Cerraron", "Guitarra Mía" y "Volver") y "Tango Bar" ("Por Una Cabeza", "Lejana Tierra Mía", "Los Ojos de mi Moza" y "Arrabal Amargo"). Después de estas creaciones, bien pudo morir Lepera ese día... Ya el tango entraba a la inmortalidad en la voz de Gardel.

III. DE VENEZUELA A LA LEYENDA

La última gira de Carlos Gardel inicia el 28 de Marzo de 1935, cuando, temeroso de los aviones, zarpa en el lujoso yate Coamo, rumbo a Puerto Rico.
Gardel llega luego en la motonave "Lara" al puerto de La Guaira, siendo recibido en apoteosis. Llega con dificultad al tren que lo trasladaría a Caracas, pero este choca, Lepera, en la confusión, es herido por las fuerzas del orden público, quienes trasladan a Gardel a un auto con techo de lona. Algunos fanáticos desgarran la lona con navajas y Gardel hace parte del trayecto a pie, rodeado por una multitud que lo vitorea.
Una vez en Caracas, se presenta en el Teatro Principal, después de un filme, como se acostumbraba, durante ochio fechas, más una presentación en el Rialto y en la radio.
En Valencia se presentó hasta la bandera en el Teatro Municipal y, en Maracaibo, en los teatros Baralt y Metro.
La ciudad de Cabimas, presa de la bonanza petrolera, contrató por mucho dinero una presentación. En ese entonces, Cabimas era una aldea de 15 mil almas, casi todas trabajadores petroleros.
El 20 de Mayo Gardel hace en dos horas la travesía Maracaibo-cabimas y se presenta con sensible retraso ante un público inflexible que, pese a que el cantante dejó lo mejor de sí, que no era poco, reaccionó destrozando y luego incendiando el teatro, a lo cual Gardel y los suyos escaparon amparados por la oscuridad de la noche.







El nefasto déspota Juan Vicente Gómez gobernaba a Venezuela para ese momento, e invitó a Gardel a cantarle, en Maracay, para lo cual el cantante dejó plantada a una multitud en el Teatro Principal.
Ante unos cien invitados y, conociendo la afición del dictadorzuelo por las peleas de gallos, cantó "El gallo Bataraz":

Pobre gallo bataraz
se te está abriendo el pellejo
ya ni pa' dar un consejo
como dicen te encontrás
porque estás enclenque y viejo
pobre gallo bataraz.

La incomodidad del silencio se podía cortar con un cuchillo. Sin embargo, a pesar de su ignorancia, Gómez es ladino, y sonríe cuando, tras la presentación, le entrega 10.000 bolívares a Gardel quien, tras rehusarlos, termina aceptando, por cortesía.
Días después, ya en Curazao, Gardel donaría ese dinero a un grupo de exiliados opositores a Gómez.

En Medellín, a despecho de sus temores, Gardel aborda un avión que, a poco de despegar, colisiona con otro. Era el Lunes 24 de Junio de 1935. Fallecía a los 44 años de edad. Ese mismo día se forjó la leyenda.

P.S.: Falta su película "Cazadores de Estrellas", con su par de canciones y cuarteto de melodías no pertenecientes a su filmografía. Omito por razones de espacio y longitud de texto.

miércoles, noviembre 09, 2005

LA ESENCIA DEL TANGO

¿Quién puede olvidar la escena de Perfume de Mujer, en la cual Al Pacino saca a bailar a una hermosa y solitaria muchacha desconocida?
Ella, azorada, le dice, excusándose: "No puedo, porque mi novio va a llegar en unos minutos", y el personaje invidente, con firmeza, replica: "Pero... ¡En un momento se vive una vida!"
Y el tango Por Una Cabeza inunda el salón.

Desecho la tentación de explayarme sobre ese filme portentoso, para pasar a hablar del tango.
La Argentina de 1880 estaba compuesta por una enorme masa de inmigrantes que duplicó desigualmente la población en pocas décadas, de manera que más del 70% de los residentes de Buenos Aires eran del sexo masculino. El 25% de estos pobladores eran negros.
Mientras los blancos bailaban mazurcas, polkas y valses, los negros hacían lo propio con los candumbes, el cual se bailaba prestando mayor atención a la percusión que a la melodía.
Tangó era el lugar donde la negritud se congregaba a festejar, y pronto la palabra obtuvo su acento grave, como la mayor parte de las palabras castellanas. En la geografía africana hay muchos topónimos con ese nombre; sin embargo, el, orgullo blanco porfía en recordar que tango era el nombre de un palo flamenco español.

En 1870 se popularizan en los barrios bajos o arrabales las academias o perigundines (Prostíbulos, pues), donde la excedente población masculina volcó sus fueros. Luego surgieron academias más refinadas -léase lupanares costosos- donde los ricachones iban de farra. El tango se inicia con violín, flauta y guitarra; cuando esta última escaseaba se acomodaban con un peine hecho instrumento de viento al intercalar un papel de fumar y soplar. El soplador marcaba el ritmo. El bandoneón, instrumento por antonomasia, llega tarde, en 1900 y sustituye lentamente a la flauta, llegando para quedarse.

Los títulos de los tangos no dejan lugar a dudas de su origen de baja ralea: "Dos sin sacarla", "Qué polvo con tanto viento", "Con qué tropieza que no dentra", "Siete pulgadas", y otros. Por cierto, el hermoso tango El Choclo, no se refiere a la mazorca de maíz, sino al chocho, coño o... Bueno. En fin.





De Argentina a París, el tango se viste de gala y pierde su aire bastardo. En esos años la capital francesa respiraba pasión por el baile y los ritmos nuevos. Los niños bien de Buenos Aires llevaron el tango a los salones de baile, donde su proximidad física y contacto con fines sensuales fueron aceptados sin problemas en la relajada capital europea.

La palabra milonga, en lengua quimbundu significa queja, lamento, reclamo, y así pasó a designar un ritmo en especial.

De cualquier manera, y a pesar de sus modestos orígenes, el tango es un baile de una belleza y sensualidad extremas, un regalo para nuestros sentidos, y también para el alma.

Quiero finalizar el artículo invitándolos a disfrutar de la película Scent of a Woman (Perfume de Mujer), sea la versión de Al Pacino y Chris O'Donnel, bajo la dirección de Martin Brest, en 1992, basada en la novela Il Buio e il Miele, de Giovanni Arpino, o la película original de Dino Risi, de 1974, con Vittorio Gassman, cuyo argumento difiere sustancialmente del remake americano de 1992. No he leído el libro.

Y los dejo con una frase del Coronel Slade en la película: "No estás en posición de disentir, niño. Yo tengo en mi mano una .45 cargada, y tú tienes espinillas."

domingo, noviembre 06, 2005

CAMBIO

El Hospital Central de Valencia era una mole insalubre, onírica e inamistosa, con vapores meritorios de películas de terror creando un vaho maloliente a mi paso. Era muy de mañana, e iba yo de corbata y bata inmaculadamente blanca a presentar mi examen final de Medicina Interna del X Semestre.
Había una tensión inusitada en el ambiente, ajena a mí, hasta el momento en el cual una compañera me puso al tanto: llevaba yo la más alta calificación posible para ese examen; el doctor (...) había jurado que esa nota no la merecía ni siquiera él, y en público se había comprometido a dejarme en ridículo. La mejor estudiante de nuestro semestre iba un poco rezagada con respecto a mí en esa materia, y había pasado noches y días en vela, tomando anfetaminas para mantenerse despierta y lograr repuntar sus notas, y era una chica atractiva con no pocos fans, mientras que yo era una especie de bohemio con vida freelance y ajena a la masa estudiantil; esa cualidad mía de "evasivo" daba un sabor extra al drama que estaba por ocurrir.
Tuve que despachar a mi amiga diciéndole que no se preocupara, que solo era una nota más, y ella fue corriendo a contar lo loco que yo estaba a los demás.
Llegado mi turno, pasé a la penumbra del auditorio, donde el jurado me esperaba. Tras unas preguntas, el doctor que era mi supuesto contendor me despachó con la doctora objeto del terror del estudiantado, quien me hizo preguntas fuertes, difíciles, pero nada rebuscadas, y me hizo pasar con un último jurado, una doctora de inclinación comunista a quien la ofendían particularmente mis camisas Lacoste, mi automóvil y mi vida clase media, obtenida con sacrificio de toda mi familia. Ella hizo el trabajo, con preguntas fuera de materia y contexto, amén de una risa burlona y comentarios gratuitos y mordaces, que hoy no recuerdo.
Al salir del examen, aprecié a mi compañera, la mejor de nosotros en cuanto a notas, llorando desconsolada. Algunos me preguntaron cómo me había ido, y expliqué que no había sabido responder un par de preguntas, lo cual dibujó algunas sonrisas disimuladas.
Al fin, se acabó el examen al salir el último alumno. Pero algo raro ocurría adentro. Se oían voces airadas, y no salía nadie a dar las notas finales. tras varios minutos de tensión, se abrió la puerta y la doctora terror inició la letanía.
Confieso que cuando me nombró, sentí algo de miedo. Pero cuando me adjudicó la máxima nota, quedé estupefacto. A mi compañera, la llorona, le ocurrió lo mismo al oír la misma nota que yo. Nunca supe qué pasó allí adentro.
Lo cierto es que, contento como nunca, fui a darle la gran noticia a mi papá. Yo había sufrido mucho en la universidad la mediocridad de los profesores, el ambiente inhóspito y anti-alumno, el calor, las bibliotecas lastimosas, el conformismo, los compañeros sin condiciones morales ni personales mínimas... Incluso el hecho de tener dos hermanos médicos antes que yo, me había traído problemas ("Tu hermano me cae mal; así que vas a tener que estudiar mucho para no repetir esta materia toda tu vida..." había sido la amenaza de un profesor una vez). Por ello desbordaba de alegría esa tarde cuando subí las escaleras de mi casa y fui hasta el cuarto de mis padres, donde mi papá leía la Gaceta Hípica, lápiz en mano, oyendo un programa hípico radial.

-¡Saqué 20 en el examen, papá!
Sin separar los ojos de la revista (sospecho que los oídos del radio, tampoco), contestó:
-Ujú.
-¿No me vas a felicitar?
-Felicitaciones, hijo - respondió con cierto afecto.
-¿Qué me vas a dar por haber sido el mejor, padre?- bromeé yo.
Mi padre soltó la revista, se quitó los anteojos y me miró. casi enojado y, con algo de ironía, me espetó:
-¿Regalarte? Sacar 20 es tu deber. Cuando sacas menos, estás robando a tu familia, que se sacrifica por tí.
Mudo y molesto, bajé las escaleras salí de la casa.

En mi familia las condiciones intelectuales lo son prácticamente todo. Desde que tengo uso de razón, daba por descontado que todos nos graduaríamos en la universidad y haríamos post-grados. No en vano mis compañeros del colegio me llamaban Mister Spock.

Mi madre y mi padre murieron prematuramente y, en 1998, mi hija menor enfermó de gravedad. Con el pasar de los días, meses, años... he entendido que la preparación intelectual no sobra nunca, pero tampoco basta. No solamente no lo es todo, sino que es poco. He tenido que caminar sobre mis huellas, empezar de nuevo, aprender a decir lo que siento y a sentir lo mejor, a creer de nuevo. Y ha valido la pena. No, no soy el mismo; hasta nuevos errores y defectos tengo. Pero en general me siento yo, Protheus.
¿Te atreves?

jueves, noviembre 03, 2005

¿Nueva? Especie Venezolana

A continuación, reproduzco comunicación de famoso paleoantropólogo en respuesta a solicitud mía.

Dr. Protheus.
Terra Incognita et maximus cognitas.
Venezuela.

Estimado Dr., en respuesta a solicitud en carta vuestra fechada el 13 del mes próximo pasado, donde nos ruega estudiemos la posibilidad de buscar fósiles de antepasados de nos, los humanos, en tierras venezolanas o, dar explicación sobre su ausencia, tenemos una buena, una mala y otra pésima noticia que dar:

Buena: se equivocan. Estudio de campo llevado a efecto demuestra presencia de numerosos individuos de especie de homínido antepasado nuestro en sus tierras.

Mala: esta especie, que se creía extinta, mora, vive y se camufla entre ustedes desde hace cientos de años.

Pésima: la especie en cuestión es el Abusopithecus cognoemadrensis, especie depredadora que acabó en el pasado con otras.

¿Cómo reconocerla?

El Abusopithecus fuma hierbas en combustión en sitios prohibidos, no tiene visión de colores, por lo cual no respeta los semáforos. Su coordinación motora es escasa, por lo cual empuja en los ascensores, maneja auto como Bonnie & Clyde, gesticula en tu rostro, choca a gente con el carrito de supermercado, etc. Su capacidad lingüística es límite, por lo cual grita en espacios cerrados, se comunica con alaridos, usa el verbo "bichar", desconocido por la ciencia, maldice e insulta sin argumentos, cuenta la película en el cine, lee en voz alta y se ríe como poseso diabólico escupiendo en el rostro a su interlocutor. No tiene concepto de temporalidad, por ello llega tarde a todo o no llega, simplemente; coloca música a volumen alto de madrugada, taconea en los apartamentos privando de sueño a los humanos, llama por teléfono de madrugada para nimiedades, etc. No conoce las normas de higiene, por lo cual lanza objetos a la calle desde el auto, casa o apartamento, huele mal y suele disfrazar ese olor con medio litro de colonia a las siete de la mañana, para luego oler a mapurite a las nueve, se saca los mocos delante de usted, se lanza p... y se hurga los dientes. Su pequeño cerebro no adquirió conceptos de familia, por lo cual anda en celo regando hijos por el mundo, sin responsabilidad alguna sobre ellos, tiene relaciones fortuitas a granel porque no cree en enfermadades de transmisión sexual, y la "vida es corta", maltrata a todos los que malviven con él (ella), vive su vida a despecho del otro. No conoce el trabajo, por lo cual su lema es "Mejor jalar b... en la sombra que escardilla en el Sol", y "Vive de tus padres hasta que puedas vivir de tus hijos". Piensa que parte del petróleo del país es de él, y que deben pagarle su parte ya, y listo. Cero concepto de Patria, por lo cual su ilusión es enchufarse en un cargo público y robar como Caco; total, hay otros Abusopithecus cognoemadrensis en la policía y entes estatales.

¿Qué hacer?

Ya Darwin advertía que las especies "o se adaptan, o emigran o perecen."
Le urgimos a emigrar, Dr. Protheus. Esta especie es altamente depredadora y se reproduce a una tasa exponencial. Exterminar a esta especie es costoso e inviable, pues está en todos lados.
El Abusopithecus, una vez aislado, termina por autoextinguirse, pues vivir sin normas, límites ni objetivos altruistas es regar la semilla de la planta de la perdición.

Atte.,
Donald Johanson
Chairman
Institute of Human Origins
Juan Luis Arsuaga
Proyecto Atapuerca

domingo, octubre 30, 2005

JULES VERNE: ¿UN FIASCO?



Mucho - demasiado - se ha dicho sobre Jules Verne. Quienes aún viven de su genialidad se cuidan que se diga de todo. Pero, ¿fue Verne todo lo que dicen que fue?

Fue precursor de los viajes espaciales e interplanetarios: Cyrano de Bergerac, y muchos otros, años antes que Verne, describieron viajes espaciales. En Héctor Servadac, jamás se menciona viaje a algún planeta.

Electricidad y motores eléctricos: Michael faraday, en 1821, fabricó el primer motor eléctrico de uso práctico, y en el siglo XVIII, la electricidad y sus generadores fueron ampliamente descritos en textos de ficción.

Submarino: muchos prototipos existían en el siglo XVIII. El inventor británico Robert Fulton presentó uno llamado -¿cómo no?- Nautilus al Directorio de París, a fines de conseguir financiamiento para su proyecto.

Precursor del Proyecto Apollo: Murthag McDermott en 1728 (más de 100 años antes que Verne) con "Un Viaje a la Luna" y Achilles Eyraud, en 1865, con "Un Viaje a Venus", precedieron a nuestro estimado Verne; los anteriores, incluso, describen el viaje en un cohete, y no en una bala de cañón, como lo hace Verne.

Fax: Alexander Bain, inventor escocés, recibió en 1843 la patente por la máquina de fax, años antes que Verne escribiese su París en el Siglo XX.

Viajes en globo: sin dar la vuelta al mundo, se habían hecho para mediados del siglo XVIII, innumerables viajes de cientos de km.

Adolf Hitler: en su libro "500 Millones de la Begún", Jules Verne describe a Herr Schultze, muy parecido a Hitler. André Laurie fue quien escribió este libro, el cual Verne modificaría y publicaría bajo su nombre. Si se trataba de Hitler, el profeta no fue otro que Laurie.


Peor aún resulta que a Verne se le han adjudicado frases, inventos y hechos que jamás salieron de sus labios, pluma o intelecto. Mencionaré algunos solamente:

En La Isla de Hélice, describe un cable telegráfico que conecta a dicha isla con el continente. No se trata de Internet, como algunos entusiastas pretenden.
En El Castillo de los Cárpatos, la imagen de La Stilla hace que algunos proclamen Verne haya "profetizado" al cine. Pero ¡la imagen no se mueve!
El francés Nicolás Cugnot, y no Verne, inventó el automóvil en 1769.
En ningún escrito de Verne aparece algo semejante a una televisión.
La máquina binaria de Von Neumann, inspiración de las computadoras modernas, no aparece ni siquiera vislumbrada en algún escrito verniano.
En Ante la Bandera, Verne crea el Fulgurador Roch, un potente explosivo. Disney se inspira en este concepto y lo incluye en su 20.000 Leguas de Viaje Submarino. La imaginación de los espectadores los puso a especular sobre la falsa creencia que Verne habíase prefigurado la bomba atómica.





Verne no era profeta, ni inventó la ciencia ficción. Fue un escritor prolífico, con obras excelentes y algunas otras no tanto. Famoso, creativo, co-creador de la "Novela Geográfica" (Ver post mío al respecto). Sus relatos apasionantes y con descripciones científicas nos hablan de ser humildes frente al poder de la Naturaleza, de valorar la ciencia y sus alcances, de la grandeza del hombre que sueña con los logros del intelecto. Era antisemita, comerciante y apasionado marinero... Todo un personaje. ¿Profeta? ¿Visionario? ¿Fiasco? Nada de eso.

jueves, octubre 27, 2005

2005: A Protheus Odissey




Anoche me dispuse a reconciliarme con mi concepto de muchedumbre que comparte ciertos límites geográficos -con lo venezolano, quise decir- y me dispuse a ver el último partido de la Serie Mundial de las Grandes Ligas.

Nada. Dios me quiere, y lo demás es cuento. En el cable, el canal TCM viene después de Meridiano, donde pasaban el partido y, por equivocación, caí en TCM, donde iniciaba 2001: Odisea Espacial, de Stanley Kubrick y Arthur C. Clarke, esa coproducción anglo-americana de 1968. Adiós, Guillén y García. En realidad, nunca he sido fan del béisbol.

Todo inicia cuando dos hordas de australopitecinos, hominoideos que son nuestros ancestros, descubren un monolito alienígena, hace 4 millones de años atrás. Este monolito es un sentinela, observador o cámara, que estudia la evolución en el planeta. Pues bien, un mono, no tan mono, usa un fémur para asesinar a un rival, y así nace la primera herramienta, al parecer de Clarke y Kubrick. Y aquí nace mi primera observación, a despecho de ser quemado vivo por alguno de los fans de la película:

La idea del "Mono Asesino", o de nuestro antepasado asesino, o que somos malos por herencia atávica, viene de las deformadas interpretaciones de Raymond Dart, insigne antropólogo, y quien descubriera el primer australopiteco, el Niño de Taung. A partir de 1947, Dart exploró cuevas subterráneas sudafricanas donde se encontraban mezclados restos fósiles de diversos animales y australopitecos. Dart recogió más de 150.000 piezas de huesos fósiles, pero de inmediato se interesó por 42 cráneos de mandril, 27 de los cuales parecían estar aplastados por su lado izquierdo. La mente calenturienta y pomposa de Dart se encontró con un periodista gringo llamado Robert Ardrey, quien sentía que el ser humano le debía algo, y de inmediato, sin mucho estudio, proclamaron, y cito a Dart: " La vida del Australopithecus era terrible. Mataba sin misericordia a sus congéneres y se los comía, como hacía con los demás animales, jóvenes o viejos."

Pero Dart no conseguía las armas con la cual nuestro asesino antepasado perpetraba sus matanzas y defendía sus piezas de caza. No encontró un solo guijarro con el cual nuestro antepasado, supuestamente diestro -no había cabida para los zurdos- aplastaba el cráneo de los "indefensos" mandriles (¿Alguien recuerda el tamaño de los colmillos de los mandriles? Parecen puñales de Rambo.¿Y la velocidad de un mandril, cerca de los 55 kmph?) Al final, "estudió" cornamentas de antílopes, tibias de herbívoros y mandíbulas de grandes dientes. Llamó, con su osadía característica, a esta cultura, osteo-donto-querática, por hueso-diente-cuerno.

La cosa habría sido dada por cierta hasta hoy (como de hecho, algunos desinformados creen aún), a no ser por el maravilloso estudio sobre cráneos de mandriles y australopitecos, descritos por Dart y Ardrey, hecho por C.K. Brain -¡Qué apellido tan bien puesto!- quien observó dos perforaciones muy cercanas, redondeadas, en muchos de los cráneos, y descubrió fueron hechas por leopardos, quienes cazaban mandriles y australopitecos y los devoraban encaramados encima de las acacias que crecían en los bordes de las cuevas, así los huesos se amontonaban en el fondo, para ser descubiertos millones de años después por imaginativos humanos. En esta premisa se basa el inicio de la película. Aunque la alegoría principal reside en el primer uso de la herramienta por parte del hombre.



Millones de años después, vemos a un durmiente Dr. Floyd viajando en Primera Clase por el espacio, con una mano izquierda -la menos útil, insisto, que soy zurdo- flotando libre, y un bolígrafo, SU HERRAMIENTA, fuera de control humano, flotando a su vez, cerca de él. Poderosa imagen: la herramienta evolucionó tanto en la mente del hombre, que éste no la gobierna.

Acto seguido nos presentan a HAL, un ordenador que controla la nave entera, de forma autónoma, y que hasta sentimientos tiene. Solo HAL conoce la misión (Alien, te copiaste. Lo siento), y no necesita a los humanos, quienes son aburridos, se equivocan y son unos bebés en el espacio: apenas pueden sobrevivir en él. HAL decide que puede prescindir de los humanos. Y se desata el drama.

Pero HAL no posee lo que el primitivo humano: instinto asesino y afán de supervivencia. De allí la colosal escena donde el comandante de la nave despacha a HAL ¡con un destornillador!

Ahora, el humano queda solo, abandonado en el espacio. Viaja a una ¿cuarta dimensión?, donde completará su evolución. Allí se ve a sí mismo tomando su última cena, y vuelca la copa de vino, pero el vino permanece, así como el cuerpo se irá algún día, y permanecerá... ¿Qué? ¿Quién?

Finalmente, el humano viejo fallece y vemos el nacimiento del bebé de las estrellas...

Esta película ha sido objeto de muchas interpretaciones. Los invito a ver esta página, no se arrepentirán.